Sin embargo, muchos de estos vehículos ya han superado los períodos de garantía, y las opciones de reemplazo de batería pueden ser extremadamente costosas. Esto ha generado una creciente demanda en los talleres automotrices para reacondicionar estas sofisticadas baterías, muchas de las cuales aún no están agotadas y pueden ser reparadas exitosamente mediante procedimientos especializados.
El reacondicionamiento de baterías no solo reduce los costos para los propietarios, sino que también contribuye a la sostenibilidad al extender la vida útil de estos componentes clave.
Las baterías Tesla han demostrado ser altamente duraderas, con casos en los que han alcanzado hasta 14 años de uso eficiente (Tesla Roadster). Esto confirma que, con una evaluación adecuada y técnicas comprobadas de reparación y balanceo eléctrico de cargas, es posible devolver a estas baterías su funcionalidad óptima, manteniendo el rendimiento del vehículo.